¿Te gustaría hacer un café espresso en casa sin necesidad de una cafetera especial? Con una prensa francesa o cafetera de émbolo puedes conseguirlo. Este tipo de cafetera te permite hacer un café filtrado con una buena presión.
Solo necesitas un recipiente de vidrio o metal con un émbolo que tiene un filtro de malla metálica. El proceso es muy sencillo: pones el café molido en el recipiente, le echas agua caliente y lo dejas infusionar unos minutos. Después bajas el émbolo para separar el café del agua y lo sirves. Pero vamos a detallarlo con más calma para que no haya ningún fallo 😉
El paso a paso detallado
Los pasos que debes seguir para preparar un café espresso con una prensa francesa, estos son los ingredientes y utensilios que vas a necesitar:
- Una prensa francesa de unos 350 ml de capacidad
- Un molinillo de café
- Unos 20 gramos de café en grano
- Unos 200 ml de agua
- Una taza
Los pasos a seguir son los siguientes:
- Pon a calentar el agua hasta que hierva y luego apaga el fuego.
- Muele los granos de café hasta obtener un polvo muy fino, casi como harina. Puedes usar un molinillo eléctrico o manual, pero ten en cuenta que el grado de molienda sea el adecuado para la prensa francesa.
- Calienta la prensa francesa con un poco de agua caliente y luego deséchala.
- Pon el café molido en el recipiente de la prensa francesa y nivélalo bien.
- Echa el agua caliente sobre el café, llenando el recipiente hasta la marca máxima.
- Agita el café con una cuchara para integrarlo bien con el agua y liberar los gases.
- Pon la tapa de la prensa francesa sin bajar el émbolo y deja infusionar el café durante unos 4 minutos.
- Baja el émbolo lentamente hasta que llegue al fondo del recipiente, haciendo una presión constante y uniforme.
- Echa el café en la taza y disfruta de tu espresso casero.
¡A DISFRUTAR!
Los trucos y consejos para conseguir un espresso de 10
Para que puedas presumir de espresso con la prensa francesa, que no es algo común, te recomiendo que sigas estos consejos:
- Usa agua filtrada o embotellada, que no tenga cloro ni otros sabores que puedan estropear el sabor del café.
- Usa granos de café recién tostados y de buena calidad, mejor de tueste medio o oscuro.
- Muele el café justo antes de hacer el espresso, para que conserve sus aromas y sus aceites esenciales.
- Usa la cantidad correcta de café y agua, según la capacidad de tu prensa francesa. La proporción ideal es de unos 10 gramos de café por cada 100 ml de agua.
- No eches agua hirviendo, sino un poco por debajo del punto de ebullición. Si el agua está muy caliente, quemará el café y lo hará amargo.
- No agites mucho el café ni lo presiones mucho con el émbolo. Si lo haces, sacarás más sustancias amargas y ácidas del café y lo harás más fuerte de lo debido.
- No dejes infusionar el café más de 4 minutos, o se enfriará y perderá su sabor y su crema.
- Echa el café inmediatamente después de bajar el émbolo, o se oxidará y se amargará.
- Limpia bien la prensa francesa después de cada uso, para evitar que se queden restos de café que puedan alterar el sabor del próximo espresso.